

La última y atrevida película de Stanley Kubrick es un estimulante viaje psicosexual, un cautivador relato de suspense y un hito en la carrera de las estrellas Tom Cruise y Nicole Kidman. Cruise interpreta a un médico que se sumerge en una aventura erótica que amenaza su matrimonio, y que podría enredarlo en un misterio de asesinato, tras la confesión de deseos sexuales de su esposa. A medida que la historia avanza desde la duda y el miedo hacia el autodescubrimiento y la reconciliación, Kubrick la orquesta con toques magistrales.