

Madre
Bajo lo que parece una de las películas más inquietantes de los últimos años se esconde uno de los trabajos más personales del director Darren Aronofsky, que tras películas como Réquiem por un sueño, Cisne negro o Noé, cambia de aires para representar en Madre una de las versiones más oscuras de sí mismo y de sus inquietudes sobre la sociedad actual e incluso del mismo público que asiste a las salas a ver sus obras.
En Madre una pareja se muda lejos de la gran ciudad y del estrés de la misma con la intención de vivir de una manera más tranquila y relajada. Buscan ese tipo de vida que muchos ciudadanos ansían, pero que por distintos motivos no terminan de alcanzar. Ya en su nueva casa reciben una visita inesperada: un hombre al que no conocen, pero que se manifiesta como seguidor del trabajo de uno de los miembros de la pareja. Esa visita será solo el punto de inicio de otras apariciones igual de complejas y en cierto modo inexplicables que harán que la vida normal y tranquila de la pareja dé un giro absoluto y nada vuelva a ser igual.
Darren Aronofsky y su crítica pasiva
El currículo de este cineasta habla por sí mismo y de las diversas fases por las que él mismo ha pasado cuando ha escrito sus distintos guiones que luego ha dirigido. Se trata de un director que no se evade de la realidad de la sociedad actual, sino que se impregna de ella y que la digiere como buenamente puede, transformando sus ideas y pensamientos en una crítica que se puede apreciar a lo largo de todo el metraje. Unas veces la manera en la que las opiniones del director se representan en pantalla ocurre de manera sutil, mientras que en otras ocasiones lo adorna todo de una capa de surrealismo que puede llegar a ser abrumadora. Pero no deja de ser un trabajo de Aronofsky.
La pareja protagonista es inolvidable
Contar con el trabajo de dos actores de tanta habilidad como Jennifer Lawrence y Javier Bardem para interpretar los dos papeles protagonistas es una apuesta de éxito asegurado. Una vez la crítica diseccionó cada uno de los elementos que se pueden apreciar a lo largo de la película, solo quedó aplaudir con fuerza y esmero el trabajo interpretativo realizado por la pareja protagonista. Javier Bardem remarca su excelete perfil y lo bien que en caja en producciones intimistas, mientras que Lawrence sigue demostrando que para ella hay mucho más allá de las grandes sagas de películas para jóvenes que ha llegado a protagonizar.
Una película para recordar
Madre es una obra de Darren Aronofsky que no busca ser complaciente con el espectador y que tampoco quiere que se produzca un boca a boca absoluto que le dé más fama que posiblemente no necesita. El director ofrece un documento que es inevitable recordar tanto si ha dejado un tipo de impresión como si el resultado ha sido opuesto. Es una de las películas que más debate puede crear de la trayectoria del cineasta, una con la cual una vez ha llegado el final quedan muchas ganas de compartir con los demás espectadores opiniones y puntos de vista.
Ficha técnica