Ken y Zoe son una pareja cerca de los 40 que se conocieron hace 8 años en la habitación 88 de un hotel. Allí intimaron, se enamoraron y decidieron emprender una vida juntos. En los inicios, la relación era muy pasional, no exenta de sensualidad y sexualidad, rozando a veces lo bizarro. La creación de la pareja fue intensa, impulsiva y lo único que importaba era la efusividad del deseo y el sentimiento.En esa habitación y durante una larga estancia crearon su nido de amor y perversión que les llevó incluso a engendrar un hijo. Ken y Zoe eran una pareja enloquecida a la que poco le importaban las reglas del exterior, más allá de los muros de la habitación 88.
https://dvdstorespain.es/es/peliculas/16062-88-dvd--8436540903273.html1606288 (DVD)<div> <br /> Ken y Zoe son una pareja cerca de los 40 que se conocieron hace 8 años en la habitación 88 de un hotel. Allí intimaron, se enamoraron y decidieron emprender una vida juntos. En los inicios, la relación era muy pasional, no exenta de sensualidad y sexualidad, rozando a veces lo bizarro. La creación de la pareja fue intensa, impulsiva y lo único que importaba era la efusividad del deseo y el sentimiento.En esa habitación y durante una larga estancia crearon su nido de amor y perversión que les llevó incluso a engendrar un hijo. Ken y Zoe eran una pareja enloquecida a la que poco le importaban las reglas del exterior, más allá de los muros de la habitación 88. </div>https://dvdstorespain.es/282101-home_default/88-dvd-.jpg1.1694instockCameo Media,S.L.5.16941.169477.37841915889742015-06-14T21:21:54+0200/Inicio/Inicio/DVD/Inicio/Películas/Inicio/Outlet DVD, Blu-Ray y CD/Inicio/Nuevos/Inicio/VELADA SP 70/Inicio/VELADA DE 100/Inicio/VELADA FR 100/Inicio/VELADA IT 100Jordi Mollà
Ken y Zoe son una pareja cerca de los 40 que se conocieron hace 8 años en la habitación 88 de un hotel. Allí intimaron, se enamoraron y decidieron emprender una vida juntos. En los inicios, la relación era muy pasional, no exenta de sensualidad y sexualidad, rozando a veces lo bizarro. La creación de la pareja fue intensa, impulsiva y lo único que importaba era la efusividad del deseo y el sentimiento.En esa habitación y durante una larga estancia crearon su nido de amor y perversión que les llevó incluso a engendrar un hijo. Ken y Zoe eran una pareja enloquecida a la que poco le importaban las reglas del exterior, más allá de los muros de la habitación 88.